El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través de la empresa concesionaria Valoriza SA, ha trabajado en la limpieza de vías, barrancos y espacios públicos antes, durante y tras el paso de la tormenta Hermine, que dejó hasta 150 litros de agua por metro cuadrado en algunos puntos de la isla.
El concejal de Servicios Públicos y Medioambiente, Carlos Tarife, explica que, antes del temporal, se activó el refuerzo de limpieza de barrancos por parte de Valoriza SA, con el objetivo de retirar todos los residuos que pudieran obstaculizar el paso del agua de lluvia. “Se trata de una labor preventiva que se realiza durante todo el año pero que ante periodos de lluvia o tormenta se intensifica”, explica.
Por otro lado, durante la alerta máxima, el servicio de limpieza se encargó de solventar incidencias leves, relacionadas con la limpieza de tierra proveniente del arrastre del agua, retirada de restos de ramas, hojas y piedras, así como recogida y limpieza de desmontes y limpieza de calzadas. “Las actuaciones se llevaron a cabo con la máxima celeridad para garantizar la seguridad de los viandantes y vehículos”, añade el edil.